La construcción de identidad regional desde las festividades en el municipio de Tame (Arauca)

Abstract

Nuestro trabajo de investigación comparte una inquietud junto con el folclorista más representativo que tiene el municipio de Tame como lo es Miguel Ángel Martín, quien sobre el problema de la identidad regional llanera comentó: En la medida en que se aleja el llanero de la frontera con Venezuela y se adentra en nuestro territorio, se nota cómo nuestro folclor empieza a desvanecerse, al punto de que en los hatos se prohíbe tener instrumentos musicales, llevar el traje antiguo es mal visto, saludar pidiendo la bendición es ridículo, poner un baile de joropo está fuera de tiempo, y bailar joropo es campeche. En Venezuela se ve a los dueños de hato, y de ahí para abajo en la escala social, usar el liquiliqui, bailar joropo y hacer versos llaneros con orgullo, con jactancia, con todo el entusiasmo que da el hacer algo que encanta, que emociona. Se lleva el liquiliqui con naturalidad, porque él es como la piel de su identidad cultural. Nosotros, en cambio, sólo vestimos a nuestros folcloristas en los festivales, con remedos del traje regional, con una sucesión de copias e invenciones impuestas por personas influyentes, hasta llegar a disfraces de trajes del llanero que van poco a poco distorsionando lo auténtico . Son múltiples y variados los esfuerzos para estudiar este problema ya que desde muchos individuos, los municipios, la academia y a veces desde el Estado, se hacen esfuerzos para rescatar, promover y fortalecer la cultura de los llanos orientales. Dichos esfuerzos chocan con un mundo altamente globalizado, ese mundo que Manuel Castells2 denomina la Sociedad Red , en donde los medios de comunicación imponen una cultura ya no local ni nacional, sino mundial, acabando con fronteras, identidades y nacionalismos ya consolidados o en vía de hacerlo. Este muro de contención, caracterizado por la imposición de modos y estilos de vida, acaban por completo con los esfuerzos por fortalecer una cultura propia, encontrar una identidad y así poco a poco contribuir con un proyecto casi perdido, precisamente por la dinámica y los objetivos del mundo actual, como es el de construir nuestra identidad nacional. Los procesos de identidad regional forman parte indiscutible de este gran proyecto de identidad nacional, precisamente cuando tenemos que aceptar que una de las características de nuestra cultura es la fragmentación regional que vivimos ya sea por cuestiones geográficas, étnicas, históricas, políticas o demás cuestiones que dificultan este proyecto.