Ospina Espitia, Marta EsperanzaVitola Cogollo, Ana Maria2025-07-072025-07-072009http://hdl.handle.net/11349/96809Algunas enunciaciones, que empiezan a configurarse en el siglo XIX y que tienen su expresión más radical en aquello que se ha llamado postmodernismo, han pretendido revaluar ciertos conceptos que en la tradición clásica, incluso en la moderna, eran considerados perennes; uno de aquellos conceptos, el más contradictorio, el más extraño, en tanto que susceptible de enmascaramiento, de permutación, de multinominación, es el concepto de “Sujeto”. Sujeto que al mismo tiempo ha sido objeto de interminables críticas, de reiteradas declaraciones de muerte; sujeto que, sin embargo, continúa habitando el trasfondo de los discursos, incluyendo, por supuesto, el discurso de la danza contemporánea. Aun cuando en el contexto de las reflexiones sociales y políticas acerca de la crisis de la modernidad, algunas corrientes teóricas optan por disolver el dualismo entre la razón y la subjetivación, no obstante, existe la opción de insistir en la necesidad de mantenerlo, en tanto que, como forma extrema en el pensamiento permite la interpretación hermenéutica y la construcción de modelos; es decir, la tensión entre la razón instrumental y los procesos de subjetivación no sólo permite que los sujetos sean conscientes y reflexivos en torno a sus prácticas sino que estas mismas pueden ser transformadas, incluso trasgredidas. La tensión deja abierto un horizonte de interpretación cuya influencia es a todas luces de orden práctico y reflexivo; es en el contexto de semejante tensión en el que instalaremos la pregunta por el sujeto de la danza contemporánea.Maestría de Artes Escénicas con Énfasis en Actuación -- Tesis y disertaciones académicasDanzaDanza modernaArtes escénicas